miércoles, abril 30, 2008

Know-how

Esta es, a mi juicio la palabra clave en el debate de si puede o no participar la iniciativa privada en exploración y explotación de los futuros yacimientos de PEMEX, que, por supuesto no es sinónimo de “privatización”, como la izquierda chillona y conservadora clama liderada por su nefasto, “Yo soy el movimiento”. Pues bien Know-how es una palabra que podría aunque no en forma precisa a “el saber cómo se hacen las cosas”, y específicamente a saber como se hace algo, que implica una ventaja tecnológica sobre algún rival, y que para su obtención existió una gran cantidad de investigación y desarrollo y que puede ser el plus de una empresa.

La tecnología básica, ahí está, es pública, los bloques de conocimiento son disponibles para cualquiera que quiera estudiarlos, pongamos un ejemplo sencillo de un objeto que involucra una gran cantidad de know-how, aunque su tecnología básica está más que ampliamente disponible: La espada de un samurai japonés: La Katana, este es una obra maestra de la metalurgia. Al examinarla, cualquier ingeniero metalúrgico podrá decirnos la composición de sus aceros (son dos, uno para el núcleo suave y dúctil y otro duro y frágil para el exterior), se sabe que es elaborada mediante forja y temple, sin embargo, muy difícilmente, cualquier empresa metalúrgica, ni cualquier ingeniero podrá elaborar ni remotamente y menos aún en un corto plazo una espada con las propiedades que un maestro artesano japonés puede lograr, por que este tiene el “know-how”, el saber hacer la espada, el saber hacer la aleación, el saber dar los golpes de forja, el saber poner pasta grafitada, en ciertos lugares para tener velocidades diferentes de temple, en fin…

Y, ¿Qué tiene esto que ver con PEMEX? Tiene que ver que en México, país en el que no se desarrolla prácticamente nada, en que se ignora casi completamente lo que es el know-how, una cosa que deben entender mis lectores es adquirir la tecnología y otra muy, pero muy diferente tener la tecnología, tener el know-how.

Y regresando al tema principal que es PEMEX; durante varios años producto de la ignorancia en lo que es realmente la tecnología, la posición oficial ha sido que no eran necesarias las asociaciones porque -además de las prohibiciones constitucionales- las tecnologías están disponibles en el mercado y se pagan cash. Ahora, esa posición es compartida por círculos opositores importantes. Las compañías no se rehusarán a vender tecnología si se llega con maletas repletas de dinero. Independientemente de esta actitud rentista, a contrapelo de las dinámicas tecnológicas de la industria petrolera internacional, tal posición desconoce realidades: En proyectos de elevada sofisticación tecnológica, como los que se realizan en aguas profundas, el conocimiento y su administración son activos que se desarrollan dentro de las compañías petroleras privadas o públicas a lo largo de varios años. Aún si la tecnología pudiera ser adquirida de fuentes externas, se requiere know-how especializado para ser apropiada, adaptada y usada de manera efectiva, además no todas las condiciones van a ser idénticas, si no se tiene el know-how, muy difícilmente una tecnología podrá ser adaptada a nuevas y diferentes condiciones.. Repito ahora con mayúsculas KNOW-HOW, esta es la palabra clave, y la razón de ser de la Reforma Petrolera. Y, este es producto del expertise y esto, no se vende, se adquiere con el tiempo, y para eso se necesita personal altamente capacitado, que no se tiene, ni se tendrá al menos en algunos años; en efecto, por increíble que parezca en la UNAM (Anales 2005) se gradúan anualmente quince veces más psicólogos que ingenieros petroleros, así aunque la petrolera es la principal industria del país la UNAM produce 620 psicólogos, 70 sociólogos, y sólo 40 ingenieros petroleros, y que entrenarlos y entrenarlos en tecnologías de punta, en el estado del arte, llevará aún más tiempo, mismo que no tenemos. Tan sólo pensemos que según la Secretaría de Energía se requerirán perforar cerca de 2000 pozos en el Golfo ¿Con 40 ingenieros por año? Simplemente imposible.

Es un error fatal creer que con tener las maletas llenas de dinero se puede adquirir la tecnología. PEMEX en años recientes, ignorante de lo que realmente necesita, por que lo es, se ha convertido en un comprador compulsivo de herramientas tecnológicas y estudios. De todo ese dinero gastado “a lo loco” sin ton ni son, realmente le beneficiará por ejemplo para explorar y explotar en aguas profundas, muy poco, será un dispendio, y a la larga la vamos a pagar mucho más caro, por que con el tiempo encima, y las reservas agotándose esta es una carrera contra el tiempo, una carrera que la izquierda retobona y chillona obstaculiza, haciendo las cosas aún más difíciles de lo que son, como si no tuviéramos bastante con nuestra ignorancia.

Otros países, entre ellos Brasil y su empresa estatal Petrobrás han tenido éxito al asociarse ventajosamente con otras petroleras, para adquirir la tecnología, y el know-how, y aún más, con ellas desarrollar nuevas tecnologías que se apliquen a condiciones diferentes y eso es lo que se debe buscar con PEMEX, la asociación con otras empresas la fortalecería y no sólo eso la haría viable, hoy, como están las cosas, en relativamente poco tiempo PEMEX dejará de ser relevante los yacimientos fáciles se agotarán y México con él nos iremos al fondo del barranco, por qué con un presupuesto que depende al 50 por ciento de las exportaciones petroleras, su cancelación implica una crisis fiscal de proporciones apocalípticas, ese es el debate de PEMEX. Y la izquierda con su actitud ignorante, sobre todo ignorante y patriotera nos están llevando al precipicio.

jueves, abril 24, 2008

Debate sobre Pemex con Información no con Emociones, no con Ideologías

El supuesto “debate” sobre la Reforma Energética, que en realidad es limitadísima y se concreta a unos pocos cambios en PEMEX se ha tornado una “cena de negros”, en la que los actores, principalmente políticos se han enfrascado en una guerra emocional e ideológica y no en lo que debiera ser un debate sustentado en la información, en los datos duros sobre el presente y el futuro de PEMEX, que es, en cierta forma el de México mismo, por que es lastimoso que este país dependa tan fuertemente de un recurso natural no renovable para ser viable.

Debo enfatizar que Calderón NO está loco, el sabía que esta tímida propuesta tenía que hacerse, y que iba a desatar tempestades, pero no había de otra, la inmovilidad característica de los mexicanos y sobre todo de la izquierda conservadora no es un camino que nos pudiera llevar a solucionar la problemática de PEMEX , por que esta propuesta se deriva de una situación alarmante en PEMEX, situación que curiosamente NADIE menciona pero que debiera ser el punto de partida del debate, y la problemática más severa y alarmante en PEMEX es:

  1. La producción de PEMEX está colapsando, tan sólo en el primer trimestre de este año se contrajo 7.8 por ciento.
    El súper yacimiento Cantarell que ha sido el responsable de la mayor parte de la producción petrolera esta en sus mínimos de 10 años según nota de Dow Jones de ayer 23 de abril y durante el primer trimestre registró una disminución de 24.1 por ciento con respecto al mismo periodo del año pasado, al sumar un millón 215 mil barriles diarios.
    En marzo Cantarell produjo un millón 152 mil barriles por día, la cifra más baja desde octubre de 1998, según información de Petróleos Mexicanos (Pemex).
  2. Las exportaciones de crudo (en volumen no en dólares) disminuyeron en el primer trimestre un 12,5% a 1,5 millones de barriles diarios, frente al mismo período del año pasado, debido a las razones antes mencionadas.
  3. Al primer trimestre de 2008, el valor de las ventas al exterior de crudo alcanzó 11 mil 318 millones de dólares, cifra 54 por ciento superior al mismo periodo de 2007, pero, en contraste las importaciones, de gas natural, gas LP, gasolina y petrolíferos, que adquiere PEMEX para venta interna, crecieron desproporcionadamente, al sumar 5 mil 477 millones de dólares, principalmente por el aumento en el consumo de gasolina. Y, recordemos que las ventas al exterior y sólo ellas son las responsables de poder cubrir el 50 por ciento del presupuesto de la Federación.

En resumidas cuentas, y para ser breves, nos estamos quedando sin petróleo y la balanza comercial de hidrocarburos en poco tiempo se hará negativa. Y, cuando esto suceda, México entrará en una severísima crisis fiscal que hará que la cuenta pública colapse y con ella el país mismo. Así de grave es la situación, pero nadie empieza por aquí, todo mundo empieza a discutir en base a dogmas e ideologías, en si va o no a ser “privatizada” y nadie se sienta un momento, tan sólo un momento a analizar la situación. Nadie.

Ahora bien, aquí viene el cuestionamiento importante:

¿Puede PEMEX revertir este colapso en la producción y en la balaza comercial dejando las cosas como están pero dándole más dinero?

Esta pregunta que debiera ser el eje del debate, no lo es, se nos van los esfuerzos en tomar partido ideológico contra una supuesta “privatización”, en que otros se lleven la riqueza petrolera, y se ignora, simplemente no existe, para los actores del “debate”, la problemática aquí expuesta. Pareciera como si creyeran que PEMEX es un popote que sólo hay que ponerlo, y que lo que se propone es venderle el popote a algún privado, la REALIDAD, dista mucho de esta percepción.

Y, la respuesta es NO, ni con todo el dinero del mundo, que dicho sea de paso tampoco es factible puesto que PEMEX cubre la mitad del presupuesto, más las aportaciones a los Estados, más el pago de los Pidiregas, y su deuda en bonos internaciones, aún con los altos precios del petróleo (que si estuvieran donde están ya hubiéramos colapsado como país), no es posible. Pero, insisto, supongamos que sí se puede y que PEMEX tiene todo el dinero que sea necesario, ¿Puede resolver la situación?

No, no puede, por que PEMEX no tiene dos cosas importantes: Tecnología y capacidad de ejecución. Y para adquirirla, no sólo se requiere de dinero, se requiere de personal cualificado, que no hay en la cantidad requerida, y se requiere de infraestructura, especializada, que tampoco se tiene. Y detallo.

A fines de los 70’s se concretó el gran hallazgo del súper yacimiento Cantarell en un área de 5,000 Km. Cuadrados se tenía un yacimiento de 30,000 millones de barriles. Este yacimiento se encuentra en aguas someras, y es y fue tan noble que bastaron 7 pozos de producción para explotar el recurso.

Durante todos estos años, debemos recordar que el petróleo no siempre ha estado a los precios en los que está, hubo períodos y hace no mucho tiempo de eso, a fines de los 90’s en que estuvo por debajo de los 10 USD el barril, y durante todos esos años, NO SE REPUSIERON las reservas probadas. No se trata de poner a debate si se hizo o no mal, no se hizo, ¿Por qué no se hizo? Eso ahora es irrelevante, no se hizo y punto.

Ya no es factible encontrar otro súper yacimiento de 30,000 millones de barriles, ahora, lo factible en encontrar yacimientos de 1,000, de 300, en fin, pequeños, eso es lo que se ha encontrado en el Golfo de México y eso es lo que puede esperar encontrarse en aguas mexicanas. Esto implica que no se van a requerir 7 pozos, se van a requerir MILES de pozos, miles de pozos, muchos de ellos en aguas ultra profundas en donde las presiones son de 300 Kg. por centímetro cuadrado, ¡formidables!, se requiere de robótica, las temperaturas ahí son congelantes, se requieres ductos altamente especializados que permitan que el crudo fluya. Se requieren miles tan sólo para explorar, y, cientos para explotar, ni PEMEX ni ninguna empresa petrolera del mundo tiene la capacidad de EJECUCIÓN, para realizarlos. Con la agravante de que PEMEX, además de la incapacidad de ejecución carece también de la tecnología.

¿Se puede adquirir la tecnología y la capacidad de ejecución? No, no se puede en un lapso razonable de tiempo, recordemos que en 9 años, se acabó el petróleo, preparar técnicos, en las cantidades requeridas, desarrollar la tecnología para exploración en aguas ultra profundas, es cuestión de varios años, quizá toda una década, pero para entonces, el petróleo ya se acabó, por esto, no se TIENE TIEMPO, simple y sencillamente, no es opción, por dura que esta sea.

Por tanto, no hay posibilidad de debatir sobre datos duros, los datos, y la información no son debatible, son eso, hechos, cifras duras, es un problema de ingeniería, no es un problema de política, y menos aún de ideologías.

Si México quiere seguir siendo un país viable, si México quiere incrementar las reservas probadas de crudo PEMEX debe de contratar o asociarse con empresas, con muchas de ellas, caso contrario PEMEX no tiene ni es factible que tenga la capacidad de EJECUCIÓN, para continuar en los años por venir siendo un país exportador de hidrocarburos, y, si eso pasa, este país entrará en la crisis fiscal más profunda de cuantas se tengan memoria, ese es el tema del debate, aunque a muchos, nos les guste aceptar la realidad.

martes, abril 15, 2008

Mayor Descubrimiento de Hidrocarburos del Mundo

Ayer y hoy, las acciones de Repsol YPF y Petrobrás suben más del 10% ¿Cuál es la razón? El hallazgo en AGUAS DEL ATLANTICO, en aguas INTERNACIONALES, por supuesto en aguas ultra profundas, fuera de la costa (y de su soberanía) de Brasil, este hallazgo es conducido por Petrobrás, Repsol YPF y BG Group.

El descubrimiento, conocido como Carioca, podría contener 33,000 millones de barriles equivalentes de petróleo y gas natural, cinco veces más que el gigantesco reciente hallazgo Tupi. Y bien podría ser el más grande encontrado en los últimos ¡30 años!

Así se hace HOY las cosas, en asociación. Y, así se reciben HOY los frutos de estas asociaciones.

Y mientras aquí, los izquierdosos nefastos, idiotas, “protegen nuestro petróleo”, del que ni siquiera tenemos la tecnología para ir por él, y peor ni si compara ni tantito con el tamaño de este hallazgo y el de Tupi.

Los brasileños encontraron la forma de subirse en cuestión petrolera al avance de la tecnología y del mundo, nosotros, aquí, hechos unos auténticos idiotas, mirándonos el obligo como siempre, envolviéndonos en el lábaro patrio para aventarnos al vacío. Aferrándonos a vivir en la década de los 30’s del siglo pasado, mientras que hoy, empresas ESTATALES, como Petrobrás, se convierten gracias a una visión moderna de hacer negocios del gobierno “Socialista” de Lula de Silva en una de las más importante petroleras de la tierra, mientras que nuestra empresa de los años 30’s del siglo pasado pierde relevancia, como la perdemos nosotros como país, que insistimos en vernos el ombligo e ignorar el avance del mundo presos de idiotas como AMLO y sus secuaces por que somos un país de imbéciles traumaditos, aferrados.

miércoles, abril 02, 2008

Mantener el Status Quo

En la cumbre de Davos Suiza de 2005, una asesora de Bill Clinton dijo sobre México en una conferencia en donde el tema no era México (ni siquiera merecimos la atención de una ponencia completa, así de importantes nos hemos vuelto), lo siguiente:

"México es un país que se niega a avanzar, es un país que podría despegar si hiciera las transformaciones que tanto requiere la economía, las reformas estructurales, pero parece que ahí la historia y los intereses creados corporativistas y sindicales les impiden ver claramente", y continúo sentenciando: "México podría tener un despegue impresionante, pero, parece que prefiere ser un mero ESPECTADOR en el avance del mundo", termina diciendo "México podría tener un importante despegue si abandona sus dogmatismos, o (aquí lo bueno) HUNDIRSE EN LA MISERA MAS ABSOLUTA" .

Así es, México simplemente se niega a cambiar, resulta por demás curioso que sea la izquierda la que más ferozmente se oponga al cambio, siendo que la izquierda se define precisamente como opuesto a lo conservador, como “el conjunto de personas que profesan ideas reformistas” (Diccionario de la Real Academia), sin embargo, la realidad es que la izquierda aquí en México es la conservadora, es la que lucha no por cambiar, sino por mantener el status quo. Extraño ¿no es así?. Resulta pues que los de “derecha” que se supone son conservadores son los reformistas y los de izquierda, que se supone son los reformistas, en realidad son los conservadores.

Lo estamos presenciando, con la escalada de los precios del petróleo, cualquier reserva adicional vendría bien al mundo, ya que sería una noticia de oferta adicional. Pero el mundo y en especial EU ya que México es la tercera fuente de suministro, será mejor que no cuenten con México.

En efecto, la producción de crudo está cayendo en México, en unos cuántos años, podría dejar de ser un exportador importante, y, en unos más importador. Y no es que “se acabe”, no, ahí está pero PEMEX carece de la tecnología para ir por él.

Todavía ni siquiera se produce una iniciativa formal de reforma PEMEX (por los “conservadores”) y ya la izquierda (“los reformistas”) empezando por su líder AMLO que amenazó con violencia y está organizando “brigadas”, “comandos”, es en serio, así se denominan ellos mismos, para cerrar aeropuertos, carreteras, en fin, paralizar el país con el fin de evitar a toda costa que PEMEX se modernice y que puede asociarse (de ningún modo privatizarse) con empresas privadas.

"Si se privatiza el petróleo o se comparte la renta petrolera con empresas extranjeras, no tendríamos realmente cómo sacar adelante al país, se cancelaría el futuro para millones de mexicanos...", dijo López Obrador a miles de manifestantes en el Zócalo capitalino.

Así la izquierda “Reformista” en realidad lo que quiere es preservar el status quo, mantener los vicios del México corporativista, socialista, cuyos resultados, no son nada buenos…Las empresas del Estado Mexicano son un factor importante en la explicación de la falta de competitividad y del crecimiento económico que debería de tener un país que comparte su frontera con la principal economía del mundo.

La sociedad mexicana es profundamente conservadora, en el sentido de que preferimos que todo siga igual, nos quejamos del bajo crecimiento económico, nos quejamos de la falta de empleos, de la pobreza, pero parece ser que propiciar los cambios incrementar la competitividad del país, atraer la inversión es algo que la sociedad no está conciente de su importancia, ni de su relación con el incremento en el bienestar y el progreso, pareciera como si pensáramos que la pobreza se soluciona sólo con dádivas, con limosnas, ya sea que provengan de Solidaridad o de Oportunidades, o de algún “Gasto Social” del gobierno en turno.

La pregunta es, ¿Por qué es esto así? ¿Por qué es tan difícil trasformar a México? ¿Por qué AMLO encuentra eco en un número importante de gente? ¿Por qué como empecé este post México prefiere permanecer como espectador ante el avance del mundo?

Todo el mundo aplaudiría el crecimiento económico, aun en sociedades y economías burocratizadas y escleróticas como la nuestra, sin embargo, muy pocos identifican el crecimiento económico con la inversión, más bien, se identifica con la propensión hacia el gasto gubernamental, por eso, se identifica a la sobriedad en el manejo de las finanzas públicas como política “Neoliberal”, y causante de todos nuestros males. El control de la inflación se ve como una política errada dictada por el FMI y “El Consenso de Washington” y la causa de nuestro bajo crecimiento económico.

El crecimiento de la economía permitiría romper paradigmas, penetrar feudos y cambiar el statu quo. Sin embargo, aunque todo mundo clama por mayores tasas de crecimiento, es evidente que en los últimos años han sido mucho más poderosas las fuerzas que se oponen a los cambios y reformas, que como hemos demostrado provienen de la izquierda, que podrían propiciar ese crecimiento que aquellas que están dispuestas a promoverlo.

Para elevar la competitividad del país la economía mexicana debiera de cambiar y transformar, debería de emprender reformas estructurales a fondo, reformas en educación, energía, leyes laborales, salud. Claro, como en toda reforma o cambio, habrá ganadores y perdedores, afectación de intereses, y esto cambiaría el status quo.

Si las reformas fueran correctamente concebidas e implantadas (algo que ha fallado lamentablemente en nuestro país empezando con TELMEX), los ganadores sería la mayor parte de la sociedad serían tantos que los perdedores, esto es ejemplo sindicatos corporativistas y “empresarios compinches”, que el resultado brillaría por sus amplios beneficios sociales. Por supuesto, como ha ocurrido, los beneficiados por el status quo actual harán hasta lo imposible (AMLO a la cabeza) por impedir que se realicen cambios que los afectan.

Lo peculiar, es que con gran frecuencia la mayor parte de la población apoya el mantenimiento del status quo, simplemente no percibe, o no entiende como podría ser beneficiada con las Reformas, peor aún, identifica las reforma con el capitalismo “compinche”, el capitalismo “de cuates”. La mayor parte de la economía mexicana es dominada por empresas familiares que desde hace mucho controlan varias industrias, aplastando la competencia y cobrándoles a los consumidores altos precios. Recurren a amigos en el gobierno para conseguir leyes y contratos favorables, no son muy dadas a la filantropía y tienen fama de evadir impuestos.

Como resultado, a muchos mexicanos no les gusta mucho la industria privada ni creen que el capitalismo sea algo tan positivo. Las encuestas revelan que los mexicanos rechazan casi por igual el capital privado mexicano en el sector energético que el capital extranjero.

Como ejemplo, basta con fijarse en la experiencia de México con la privatización. El monopolio estatal telefónico Teléfonos de México, Telmex, se vendió al empresario mexicano Carlos Slim. Unos 15 años después, Telmex ofrece un servicio mucho mejor, pero su dominio del sistema de línea fija limita la competencia e impone altos precios a los usuarios y evita la competencia por que tiene una dominancia tal cobrando lo que le da su gana por la interconexión con las redes de la comptencia. Actualmente, Slim es el segundo hombre más rico del mundo, según la revista Forbes, detrás de Warren Buffett.

"Los mexicanos asocian a las empresas privadas con un aumento de precios y no quieren pagar más por la gasolina", señala Jorge Buendía, encuestador de Ipsos-Bimsa, la filial mexicana de la empresa francesa de sondeos Ipsos.

Por otro lado, muchos mexicanos ven ventajas en las empresas controladas por el gobierno, incluso si el servicio que ofrecen es mediocre. Muchos mexicanos pobres reciben subsidios para sus cuentas de electricidad. Los conductores creen que, gracias al gobierno, el precio de la gasolina no ha subido demasiado en los últimos años, algo que es más fácil de hacer para una empresa estatal que no tiene que responder ante accionistas.

Además, el comportamiento de las grandes empresas ha reforzado su imagen negativa entre los mexicanos. Los dos principales canales de televisión tienden a usar sus noticieros para promover los intereses de sus propietarios, usualmente atacando a rivales personales o políticos. El turbio nexo entre empresa y gobierno también juega en contra de la reforma energética. El titular de la Secretaría de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, un aliado de Calderón y el responsable de promover la reforma energética, hace poco estuvo en el ojo del huracán cuando se reveló que la empresa de camiones de su familia se había beneficiado de contratos de Pemex cuando Mouriño trabajaba bajo el mando de Calderón en la Secretaría de Energía hace algunos años.

También como ya escribí en este espacio, los políticos crean el caos, responden a su propio beneficio, y su propio beneficio consiste en responder a los grupos organizado de poder más poderosos y mejor organizados igual los de carácter político-burocrático que sindical y empresarial, todo lo cual favorece al statu quo. Así estos grupos están sobre representado en las cámaras y no el interés del conjunto de la población.

Otro factor no menos importante es el nacionalismo mal entendido. En las escuelas se nos enseña que hemos sido un pueblo golpeado y abusado por extranjeros, empezando por la conquista, pasando por el 5 de mayo, la intervención francesa, Maximiliano, la invasión de lo EU, la pérdida de más de la mitad del territorio, en fin, somos un pueblo traumatizado, y vemos en los extranjeros aquellos que vienen a cambiarnos oro por espejitos….

Creo que estos factores explican nuestra resistencia al cambio. La población mexicana ha llegado a la conclusión de que un mayor crecimiento de la economía sólo beneficiaría a los intereses más poderosos de la sociedad y, por lo tanto, considera que no vale la pena asumir el costo o los riesgos de promoverlo, y por ello vota por mantener el status quo, aunque este en la práctica sea el culpable de la pobreza y la falta de empleos.

Y para cambiarlo se necesita liderazgo, que no hemos tenido, si se quisieran emprender las reformas lo primero que se necesita es que la sociedad las perciba como benéficas en forma directa, y para esto, se necesita de un real estadista, y de un gobierno que modifique percepciones. Para esto, debiera de empezar por un ataque frontal a los privilegios e intereses que la sociedad asocia con el poder, el abuso y la inflexibilidad que son el pan de cada día de la política. Sólo así, se podrá cambiar el status quo y emprender el camino al progreso. Desgraciadamente, estamos muy lejos de que esto ocurra….