viernes, abril 13, 2018

El “Desarrollo Estabilizador” de López Obrador




En una carta, entregada en exclusiva a El Financiero, el aspirante a la presidencia por Morena-PES-PT garantiza un cambio ordenado, eliminar la corrupción, Estado de derecho, renegociar el TLCAN y un modelo económico como el del 'desarrollo estabilizador'.
¡Otra vez renegociar el TLCAN! Pero ese no es un tema que por el momento esté bajo consideración, vamos a enfocarnos a su propuesta económica que es lo que más importa.
En el punto 4 de la referida carta se lee lo que sigue:

“4. En términos generales, el modelo económico que proponemos es semejante al que se aplicó en el país en el periodo denominado del “Desarrollo Estabilizador”. Con esa orientación la economía mexicana creció a tasas del 7 por ciento anual, sin endeudamiento, inflación ni devaluación de la moneda. No es nuestro propósito, desde luego, revivir un modelo del pasado y aplicarlo de manera mecánica; pretendemos retomar las lógicas que funcionaron, ajustarlas a las condiciones actuales y aplicarlas con una visión política distinta, de pleno respeto a los principios democráticos y a la legalidad, en un entorno en el que deben tomarse en cuenta factores tan diversos como la inserción de México en la globalidad, el surgimiento de una nueva generación de derechos individuales y sociales y una vertiginosa transformación tecnológica.”

Le gustó el nombre y el prestigio de esa época en la historia de la economía de México, en la entrevista con Adriana Pérez Cañedo en la AmCham , también insistió en su “modelo”: “Desarrollo” bonita palabra, se va a desarrollar la economía, sinónimo de crecer ¿no es así? Pero además “Estabilizador”, de estable, esto es sin volatilidades, en especial en la inflación, el tipo de cambio y las tasas de interés. Más adelante en esa misma carta afirma que respetará la autonomía de Banco de México y que la economía funcionará sin déficit. ¡Hombre que bien!

¿Qué fue el Desarrollo Estabilizador?


Al terminar la 2ª Guerra mundial, el mundo entero comenzó una expansión económica sin precedente, puede afirmarse que no fue sino hasta entonces en que realmente terminó la Gran Depresión que inició en 1929. Este auge fue contagiado a México que comenzó a importar bienes manufacturados principalmente de los EUA, pero nosotros, que prácticamente carecíamos de industria sólo teníamos para exportar productos agrícolas, minería y algo de petróleo, la balanza de pago era deficitaria (aún hasta ahora lo sigue siendo), y los dólares adicionales sólo podían ser adquiridos mediante deuda pública. Los dólares  transformados en pesos causaron una gran inflación. Fue con Miguel Alemán que comenzamos a combatir la inflación mediante la industrialización bajo el esquema de sustitución de importaciones.  Que, sin embargo resurgió.  Los bienes de capital tuvieron un incremento llegando a importar el 40% debido a que con las políticas de la sustitución de importaciones se tenía que adquirir la maquinaria y el equipo para el proceso productivo. En cuanto al producto intermedio, las importaciones se encontraban entre el 45 y 50% ya que se necesitaban de piezas para realizar la producción, por lo cual no necesariamente se tenía que reducir el volumen de importaciones.
Afortunadamente, o quién sabe, quizá fue desafortunadamente en los años 1960’s se encontraron grandes cantidades de petróleo en lo que se denominaba  “La Faja de Oro” con lo que empezó el venero del diablo a actuar y permitirnos exportar y conseguir las preciadas divisas.
Ya con divisas, fue relativamente fácil bajar la inflación y mantener el tipo de cambio con el dólar constante, lo que llevó a México de 1958 a 1970 a lograr altas tasas de crecimiento económico y muy importante con muy baja inflación, lo que se llamó el “Desarrollo Estabilizador” de Antonio Ortiz Mena que fue secretario de Hacienda bajo los sexenios de Adolfo López Mateos y Gustavo Díaz Ordaz. Las tasas de crecimiento eran ligeramente superiores al 6% y la inflación del 2%
Bajo la perspectiva de esas cifras, no extraña que esos tiempos sean vistos con añoranza, y que muchos quisieran regresarnos a esas épocas del “Milagro Mexicano”,  aunque debe señalarse que existía al menos un serio problema, el de la falta de capital y de formación de capital, esto es de ahorro.
Esto es,  en el país no había suficiente capital como para crecer sostenidamente: las actividades de producción requieren capital, por ejemplo, préstamos para crecer y dentro del país no se generaba ese capital.
Lo mismo para las personas que, por ejemplo, querían comprar casas por medio de hipotecas… la escasez de ahorro impedía que hubiera suficiente dinero para prestarles.
La sustitución de importaciones, por supuesto se acompañó del proteccionismo esto es proteger a la industria local de la competencia externa, se pensaba, y todavía hay muchos que así piensan que el desarrollo industrial sólo puede lograrse cerrando fronteras y con una política rectora por parte del estado.
Según Carlos Tello “Notas sobre el Desarrollo Estabilizador” Nos habla del esquema mercantilista imperante,
“Los empresarios, incluyendo –a los banqueros–, se comprometían a  invertir, y mucho, y a cambio de ello tendrían utilidades considerables. El gobierno les daría el apoyo necesario, incluyendo todo tipo de subsidios, para que así fuese. El sistema tributario no gravaría en exceso a las utilidades de sus empresas y los intereses y los dividendos mantendrían su carácter de ingreso personal anónimo para fines tributarios. La industrialización del país, que llevarían a cabo fundamentalmente los particulares con el apoyo del sector público, se desenvolvería, en el capítulo de las manufacturas, bajo un rígido sistema de protección (tarifas y controles cuantitativos) frente a la competencia del exterior."
No es de extrañar que, muchos quisieran que esto se repitiera.
Sin embargo, debe insistirse, el gobierno, se comportaba conservadoramente en el manejo de sus finanzas, sin contraer deudas cuantiosas y financiándose con sus propios recursos.
La aplicación de la idea proteccionista parecía estar funcionando muy bien en medio de una estabilidad económica notable. En los mercados nacionales había productos fabricados en México: las empresas en México tenían mercados cautivos nacionales pues las importaciones estaban prohibidas o tenían impuestos muy altos de importación.
Sobre el crecimiento mayor al 6% debe enfatizarse que no es lo mismo crecer de cero, en aquellos tiempos no había nada, no se producía nada, y es fácil lograr un crecimiento del 6% de una base muy baja. Hoy las cosas son diferentes y crecer 6% de la base actual es realmente difícil. Para expresarlo simple el 6% de 10 es 0.6, pero el 6% de 1000 es 60 que es cien veces mayor al 0.6. A veces a la gente se “le va la onda” con eso de los porcentajes.
Sin embargo, esas empresas no tenían incentivos para mejorar la calidad de sus productos, ni reducir sus precios. No tenían la presión de la competencia para hacerlo. Podían hacer con el consumidor lo que les viniera en “su real y regalada gana”. Es decir, en México no existía el Capitalismo, en donde el consumidor es el soberano y con el voto de su preferencia alienta o destruye empresas, lo que existía era el viejo mercantilismo acompañado del favoritismo del gobierno a ciertos y específicos “empresarios” que eran favorecidos por las políticas públicas de la “rectoría” del estado.
Por esta misma razón surgió con fuerza inusitada el contrabando. Si, por ejemplo, los consumidores querían comprar cigarros, los disponibles eran todos producidos en México… pero había oportunidad de comprar cigarros importados en el mercado negro de contrabando. La TV más popular era la Sony, más sin embargo todo aparato de esta marca era de contrabando. En estas épocas, que se prolongaron también en los 1970’s y parte del 1980’s en que seguimos comercialmente encerrados cualquier fulano con que anunciara a la Secretaría de Industria y Comercio que iba a fabricar un bien, automáticamente las aduanas se cerraban para ese bien. Así por ejemplo sólo existían tornamesas marca Garrard que habían comprado un modelito obsoleto al fabricante original y sólo de éstas había.
Éste fue uno de los efectos secundarios de la política proteccionista, el abrir una oportunidad de negocio para los contrabandistas. La amplia frontera con los EEUU hizo posible introducir al país todo tipo de artículos que se ofrecían en mercados ilegales.
Pero el proteccionismo conlleva dos problemas graves: Primero que el crecimiento de la industria estaba limitado a sólo el mercado interno, al principio sí crecían, porque no había nada, pero más adelante no podía crecer más allá del crecimiento de la población, y Segundo, al estar protegidos, no les interesaba para nada exportar, además que por su pésima calidad y alto precio estaban totalmente fuera de los mercados internacionales, y en consecuencia mejorar su calidad, innovar mejorar la productividad para con esto adquirir competitividad, estaban felices con el esquema mercantilista libre de competencia.
Pero el error más grave se cometió cuando se intentó extender el proteccionismo y la sustitución de importaciones a los bienes de capital, es decir máquinas y herramientas que producen los bienes de consumo.
Es fácil por ejemplo producir cerveza o cigarros, pero no lo es producir las máquinas que los producen. Y no sólo es la dificultad de producirlas, es que el mercado interno no da para justificar las cuantiosas inversiones.  Aquí, por ejemplo se hicieron cuantiosas inversiones para producir turbinas de vapor e hidráulicas, claro teniendo como socios a los que proporcionaban la tecnología, acabaron de talleres de reparación…
Las acciones de la política proteccionista requerían estimular a las empresas para sustituir importaciones y para ello se les podían otorgar subsidios o tratamientos fiscales preferentes. Estas acciones, desde luego, produjeron gastos adicionales del gobierno, que tuvo que iniciar una tendencia de endeudamiento creciente (muy clara en la etapa del populismo).
Las empresas se acostumbraron a recibir ayudas gubernamentales, una idea que aún prevalece en  nuestros días. Pero selectivamente, había que estar en la lista de empresas con interés del gobierno para ser desarrolladas, la “política industrial” decían.
Y toda la inversión que hubo en la industria en el campo cero, o casi cero, debido a la inseguridad en la propiedad de terrenos, los que cada vez eran más pequeños e ineficientes para producir. La Reforma Agraria sencillamente no funcionó como generador de ingresos para su población.
Así el crecimiento de México dependía de las divisas, de los dólares que sólo se obtenían de los productos agropecuarios, la minería y el petróleo, que al principio fueron suficientes pero que más adelante se quedaron cortos para cubrir el creciente déficit en la balanza de pagos,
Ya para el 8 de junio de 1971, con motivo de la reunión anual sobre México del Comité Interamericano de la Alianza para el Progreso celebrada en Washington D. C., Mario Ramón Beteta , secretario de Hacienda ya con Echeverría explicó a los organismos financieros internacionales que:

Para consolidar debemos contrarrestar los factores limitantes del desarrollo que se habían venido acumulando. Es decir, el excesivo endeudamiento externo, la escasez de ahorro público y el creciente déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos…”

El Desarrollo Estabilizador había muerto, dando paso al “Desarrollo Compartido” de Luis Echevarría que inaugura la etapa del populismo en el manejo económico de México.
Eso fue el Desarrollo Estabilizador de Ortiz Mena.
Y obviamente embona muy bien con las ideas añejas y anquilosadas en la “Economía” de López Obrador.
Fue un México en que las actividades agrícolas tenían importante peso, y que aspiró a la autosuficiencia alimentaria, al menos con el mítico maíz. Una economía en que el producto de exportación más importante era el café. El candidato de Morena mantiene esa noción de los recursos naturales como 'palanca del desarrollo' (en su caso con el petróleo). Es alérgico a la noción de productividad como puntal del crecimiento económico, como muestra su peculiar idea de crear muchos empleos con la pavimentación de carreteras a mano (esto último realizado por el presidente que acabó con el 'desarrollo estabilizador': Luis Echeverría).  En consecuencia se parece más a Echeverría que a los predecesores de éste.
Los Priistas López Mateos, Díaz Ordaz, Echeverría y López Portillo, no eran como lo es López Obrador muy afines a lo extranjero, particularmente a la inversión, los dos últimos fueron francamente hostiles al sector privado no sólo el extranjero, también el local.  Todos ellos “Hecho en México”, por sobre todo lo extranjero, ayer en Zacatecas AMLO revivió el “Plan de Ayala del Siglo XXI”  con las palabras “Vamos a consumir lo hecho en México, nada de cosas extranjeras”, y muy particularmente los alimentos y menos el mítico maíz “Sin maíz no hay país” dicen sus allegados.
Ya por lo pronto, como lo estableció recientemente en Zacatecas, promete revitalizar el "Plan de Ayala 2.0" o del Siglo XXI 
Ahí, en el templete, Yeidckol Polevnsky, presidenta de Morena, resguarda el documento. En él, señaló el candidato presidencial, se dará un viraje a la política económica para “ya no comprar en el extranjero lo que consumimos; vamos a producir en México todo lo que consumimos”.
AMLO al igual que los presidentes referidos del viejo PRI restablecerá el “Muro del Nopal” como se le conocía a la frontera con los EU.
Como evidenció en Zacatecas su analfabetismo económico  lo mantiene mirándose el ombligo, lo suyo el campo que produce maíz, fríjol, frutas y maderables, los campesinos con sus precios de garantía felices con este subsidio del gobierno, y como todo subsidio produciendo pérdidas cuantiosas al erario y que finalmente serán pagados con impuestos, deuda y/o inflación. (Dice que no va a haber nada de los tres).
También estos presidentes eran muy proclives a crear empresas del estado, rescataban empresas quebradas para “proteger el empleo” pero seguían perdiendo dinero y ese dinero otra vez o sale de impuestos o de deuda o de inflación…
No menos importante es el Gasto Alocado en Inversión del cual López Obrador es fanático: Sus refinerías, sus trenes bala (que en todas partes del mundo son pésimos negocios y deben ser subsidiados), y lo peor sus carreteras construidas sin maquinaria a puro pico y pala y carretilla. Eso fue lo que precisamente originó la crisis de 1982 con López Portillo, fue tan grande como más de 140 por ciento del PIB y en dólares pura deuda externa, y tenía que ser así, puesto que internamente no hay ahorro ni capital que pueda utilizarse en esas escalas.
La gasolina a precio fijo con un precio muy inferior al del mercado internacional y, la paridad del peso frente al dólar fija. Contrario a lo que creé el de Macuspana, para poder mantener la paridad se requieren dólares y éstos ante la ausencia de exportaciones significativas sólo pueden conseguirse mediante deuda externa. Por eso cuando todo tronó el dólar se disparó para buscar su real valor de mercado.
Sí es lo que sueña AMLO un país mercantilista, cerrado, aislado del mundo con su “Muro del Nopal”, los mexicanos consumiendo lo “Hecho en México” que ahora será mucho pero mucho muy reducido a lo que estamos acostumbrados, eso será mucho muy caro y de mala calidad no tendrán competencia.

Es un viaje a 1958 no es el país que queremos en el 2020 ¿O sí?


jueves, abril 05, 2018

Estatización de los Fondos de Retiro con López Obrador


López es un populista, y un populista necesita DINERO. Ya Margaret Tatcher establecía que “El Socialismo funciona hasta que el dinero se acaba”.
Escribía ayer que Juan Domingo Perón el “Tata” Lázaro Cárdenas de los argentinos dilapidó 500 toneladas de oro que se encontraban en la bóveda del Banco Central para sus “programas sociales”.
Aquí , en México el dinero para dilapidar no fue oro en bóvedas fue petróleo y este se terminó. Pemex cada vez produce menos petróleo, al grado que ya para el mes pasado la producción estaba por debajo de los 800.000 barriles diarios esto es 76.3 % menos que cuando Fox Pemex producía 3,370 barriles al día.
La monetización del petróleo exportado era el filón que han usado los gobiernos mexicanos para dilapidar riqueza y afianzar el clientelismo, en él se sustentaban los programas “sociales”.  En el presupuesto de Ingresos de Fox, 40% se sustentaba en eso, en el petróleo exportado. Hoy, el petróleo no aporta ni el 4% del Presupuesto, como escribía se terminó…



Por esto, para poder mantener los programas “sociales”, y todo el inmenso aparato burocrático, EPN recurrió primero a la “Reforma Fiscal”, que no es otra cosa que recaudar más limitando las deducciones y aumentando los impuestos y, endeudándose, hasta llevar la deuda al 50% del PIB actual, y esto seguiría de no ser por las calificadoras de riesgo crediticio Strandar & Poors, Moody’s y Fitch que dejaron claro que si le seguían subirían el riesgo del país y con ello los interese de la deuda, que ya son muy elevados, 40% de todo el ISR recaudado es utilizado en servicio de la deuda. También por este motivo se puso el IEPS a los combustibles razón por la cual se dio el “gasolinazo” que tanto ha perjudicado a Meade al que identifican como el “padre del gasolinazo”.
Así que ya no hay créditos para México. Por esto, la obra de infraestructura más importante de EPN (y de muchos otros presidentes), el NACIM recurrió a la colocación de deuda entre nacionales e internacionales mediante la FIBRA E en la cual 10% fue puesto por cuatro Afores: Inbursa, Pensionissste, Profuturo y Banorte XXI, con una inversión conjunta de 13 mil 500 millones de pesos.
He advertido en este espacio que la enorme oposición de López al NACIM se debe fundamentalmente a que tiene invertido dinero de las Afores, y él quiere ese dinero para sus “proyectos”, esto es sus refinerías, sus trenes bala, sus carretas construidas sin maquinaria a puro pico y pala para tener más trabajadores (conoce muy bien el concepto de productividad el señor).
En la Argentina en que desde su escenita lamentable del “default” (dejaron de pagar sus créditos), lo de los fondos “buitre”, etc. Se quedaron sin acceso a los mercados de capitales, a los créditos. Así que en 2008 Cristina Fernández de Krischner decidió estatizar las Afores que en ese entonces tenían unos 30 mil millones de USD de los trabajadores argentinos.  Algo similar hizo Evo Morales en Bolivia…
Así que faltamos nosotros, si López llega a la presidencia, muchos se llevarán una enorme sorpresa,  de la que no va a hablar en la campaña, y que es que desaparecerá la Afores y las estatizará en una institución única.
La que sigue es una captura de pantalla del párrafo referente a los Fondos de Pensiones contenido en el documento extraído de la página de Morena titulado
“Proyecto Alternativo de Nación 2018 – 2024 Plataforma Electoral y Programa de Gobierno”




Así que claramente queda indicado que no se va a obligar a la Afores a invertir forzosamente sino que las Afores existentes las va a desaparecer “recatando las Afores de los (malvados mafia del poder) bancos”.  Y no menos importante lo último que escribe:
Hay que tomar medidas para garantizar que los fondos de los trabajadores administrados por el Instituto sólo puedan canalizarse a inversiones estratégicas de la economía nacional o en obras de beneficio social”
Por favor, léanlo y re léanlo varias veces para que comprendan el destino de los ahorros de los trabajadores que van a pasar a ser impuestos, que financiarán las “inversiones estratégicas”, esto es refinerías, trenes bala, y todas las idioteces que se le ocurran para “reactivar la economía”. No importa, para nada que sean rentables, no importa si tú vas a poder vivir bien a tú retiro, y que tu dinero ahorrado (a fuerzas) no va a ser invertido en proyectos rentables que permitan mayores interese, no, lo importante es que sean “estratégicos” y de “beneficio social”.
Así fue con los bancos estatizados por José López Portillo, que fueron un estercolero, como todo lo “nacional”, otorgaron créditos por motivos políticos, créditos incobrables, tenían enormes pérdidas (sólo Confía era el único banco más o menos sano, y era pequeño),  por ejemplo, los inversionistas que compraron Serfin, (Inverlat-Lagorreta) de plano reclamaron al gobierno por la porquería de banco que era y así estaban todos, aunque menos. Esto, fue la semilla de la crisis de la deuda que originó más tarde el Fobaproa. Pero eso, claro, no lo dicen.
Así que imaginen cómo va a ser manejado su dinero para sus pensiones, no duden ni tantito que el riesgo de perderlo todo es altísima, pero claro te darán $ 1,600 de pensión alimentaria al mes…
Así que ya encontró el populista el filón que hacía falta para ejercer su populismo: Tú dinero en las Afores.
Realmente, no comprendo cómo alguien es su sano juicio pueda siquiera considerar el votar por él.

miércoles, abril 04, 2018

El Presupuesto de López Obrador (Lopitos)

Aquí está el "presupuesto" de Lopitos, que asciende a ni más ni menos que 4 millones de millones de pesos; que claro, debe de agregarse al presupuesto "normal" de la federación, que es de 5.3 millones de millones de pesos.
Afirma Lopitos, que quitándole sus pensiones a los ex presidentes, bajándole los sueldos a los magistrados de la Suprema Corte, y a los burócratas de "angora", (a alguien de los "malos", de la "mafia del poder" se tenía que joder) y claro dice él siendo "austero", buscándose un rinconcito con su salita de estar su bañito y su cocinita en Palacio Nacional y cerrando los Pinos que va a ser "Centro Cultural", y claro, quitando la corrupción y lo que se roban los del PRI, ya con eso va a ahorrar (según él claro, las cuentas pormenorizadas no están en ninguna parte), la friolera de 500 miles de millones de pesos.
Claro, para sus seguidores, que se chupan el dedo todavía, y les encanta que les den atole con el dedo se la creen que con sus "ahorros" sale todo su desmadre y que no va a ser requeridos nuevos impuestos, ni aumentar los actuales, en más va a quitar el IEPS a los combustibles (Promesa 24 de la tabla), no va a incrementar la deuda (ni le prestarían al menos no a las tasas actuales para los bonos mexicanos).
Entonces se podría concluir que es una payasada más de "simpatías" Lopitos. Una mentira del embustero legendario...
¡Pero no! Revisando la historia de célebres populistas estirpe a la cual claramente pertenece Lopitos, como Juan Domingo Perón (el "Tata" Lázaro Cárdenas de los Argentinos), que sentenció a muerte la economía Argentina. Juan Perón tenía una clara inclinación corporativista, él y su carismática esposa Evita dirigieron toda su retórica populista en contra de los “malosos” ricos. Así como nuestro Lopitos y su "mafia del poder".
Perón tenía más de 500 toneladas de oro en la bóvedas del Banco Central, mismas que desaparecieron, no por que se las haya robado él, no, simplemente el populismo requiere enormes cantidades de dinero y 500 toneladas no fueron suficientes...
Y ese es el problema con Lopitos, que no haya dinero, que la producción de Pemex haya caído, es más dice que ya no vamos a exportar petróleo todo va a ser para sus refinerías, que `por cierto cuestan las dos más que el aeropuerto, y que claro lo quiere financiar (puesto que nadie le va a prestar) con el dinero de los trabajadores para su retiro en las Afores. Por eso se opone tan fervientemente al Nuevo Aeropuerto, porque tiene invertido dinero de las Afores y ese dinero lo quiere para ËL. Para sus refinerías, que serán un pésimo negocio puesto que va a vender a precios subsidiados, así que los ahorros de Afores Bye-bye....Esos sí que se van a ir al caño.
Pero su vocación populista tiene que cumplirse ¡Faltaba más! no va a decepcionar a su "tigre" no se le vaya a poner loco al ver que todo eran puras habladas....
Así que se va a ir contra Banco de México, le va a quitar la autonomía, le va a quitar las Reservas Internacionales, y cómo el peso se devaluaría fuertemente lo va a sacar del mercado a la libre flotación, y le va a poner un tipo de cambio "oficial", que se "deslizará" a su voluntad. Claro esto va engendrar un mercado "negro", o paralelo con el USD-MXN con su real valor, incluso mayor a que si estuviera libre.
Pero por lo que realmente va Lopitos y es por la maquinita de imprimir billetitos, ¡muchos billetitos" miles de billetitos! y ahora sí, a cumplir con todo lo prometido a cabalidad.
Claro, al existir más billetes y los mismo bienes, se encarecerán se producirá INFLACIÓN. Rápidamente sacará su decreto de PRECIOS MÁXIMOS, con pena de cárcel, y expropiación, a todos esos malditos "especuladores" y "acaparadores", que no sacan su mercancía a la venta (¿Cómo la van a sacar si el costo de reponer el producto es mayor al precio de venta?).
Decretará aumentos generalizados a los salarios mínimos y a todos, pero los precios subirán en mayor proporción a la brevedad, estaremos en una espiral inflacionaria.
Y, la economía de este hermoso país destruida, echa mierda. Carestía, ¡Hambre! será la siguiente página.
Ese ha sido el destino de los pueblos que eligen democrática mente populistas. Siempre ha sido así, y así será en México con Lopitos.
Y, al terminar su mandato, si es que no altera la Constitución para perpetuarse en el poder, el que llegue tendrá que limpiar el estercolero dejado, sanear, contener los salarios, anclar el tipo de cambio, y verdaderamente establecer un plan de austeridad con despido masivo de burócratas, cierre o privatización de bienes públicos. Y una devaluación qué van a ver lo que es devaluación no como la actual: López Portillo tenía el USD en 23.00 y cuando ya más o menos se estabilizó valía 400. Ustedes dirán si tiene o no un costo encumbrar a populistas.
Y claro alguien tendrá que pagar los platos rotos, el FOBAPROA al que se opuso Lopitos (por joder claro), será un cuento de niños con el monto del desastre.
Y México saldrá adelante, después de mucho sufrimiento, pero saldremos adelante.
Ojalá impere la sensatez en ti que tiene el poder de cambiar este destino manifesto con tú voto en CONTRA de AMLO y Morena y podamos evitar esta trágica historia.