lunes, mayo 15, 2006

Para Mejorar la Educación en México, una Propuesta

Cuando se pregunta, ¿Qué es lo más importante para que el país progrese?, la respuesta es unánime: La educación. Todos estamos al menos de acuerdo que esta es o debería de ser la principal prioridad nacional. Los economistas llaman a esto la formación de “Capital Humano”. Hay pues completa unanimidad en ello.

Por eso, pareciera ser inexplicable que no obstante la declaración por unanimidad de ser los más importante, en la más reciente evaluación de la OCDE informó que México se ubicó en el último lugar en las áreas de matemáticas, ciencia y lectura de comprensión, pero eso no es todo, la clasificación podría ser muy estrecha, no, se agrega que la evaluación está muy por debajo del promedio de las 30 naciones que conforman el organismo internacional. La OCDE indicó también que se agrandó la brecha entre la calidad de la educación impartida por escuelas públicas e instituciones privadas. Y no es sólo en la educación básica e intermedia, también en la superior, esto es patente cuando algún egresado de alguna universidad quiere hacer un examen de admisión para hacer estudios de postgrado en el extranjero en alguna universidad de prestigio, ahí realmente se dan cuenta de la precariedad de su instrucción.

Y no es sólo la OCDE la que corrobora el desastre (hay otra palabra mejor para describir la situación) de la educación en todos los niveles en México. Estamos prácticamente fuera de la “Economía del Conocimiento”, son casos verdaderamente excepcionales, casi ninguno, los que existen en México de “Mente-Factura” que determinará el futuro de los países en el siglo XXI y tenemos que conformarnos con la manufactura del siglo pasado. Las empresas cuyo principal capital es el conocimiento están prefiriendo países de Asia y Europa del Este para desarrollar ahí la economía del conocimiento, y mientras tanto, nosotros, presas de nuestros mitos, ni siquiera estamos de espectadores, ya que ni siquiera nos damos cuenta lo que está pasando en el mundo.

¿Cuál es la razón? ¿Gasto en educación? Durante los últimos años hemos gastado más y más en educación, mientras que los resultados empeoran, la misma OCDE reconoció que el gobierno mexicano "está invirtiendo recursos considerables en el sistema educativo; el gasto en educación crece mucho más rápido que la riqueza nacional (PIB per cápita), y los salarios de los maestros mexicanos crecen más rápido que en todos los países de la OCDE" y en términos absolutos es la porción más importante del presupuesto, no, la razón del fracaso no es gasto, la razón del fracaso del sistema educacional es la misma del fracaso del sistema socialista soviético.

La educación es una las empresas socialistas más grandes de México, y todas las empresas socialistas del mundo, sean siderúrgicas, agrícolas o educativas, tienen ciertos puntos comunes: todas producen artículos de mala calidad a muy altos costos, con privilegios especiales para un grupo reducido.

En específico, en el sistema educativo socialista en manos de los políticos se comete un grave error: Los miembros del magisterio se desempeñan para complacer a sus superiores, dentro de una jerarquía burocrática y sindical, un sistema de escalafón totalmente arbitrario sujeto a la voluntad del sindicato y que por lo tanto no está ligado en forma alguna a su desempeño como educador el tener mejores remuneraciones. No son pues los “clientes” de la educación: Los padres de familia preocupados por la educación de sus hijos los que determinan la remuneración del maestro.

Así, el magisterio desarrolla su propia dinámica política, sus incentivos, sus premios y sus castigos, independientemente del rendimiento como educadores. No sólo eso, el gobierno extiende sus tentáculos y siente que debe intervenir también en las escuelas privadas. Con el poder coercitivo que les da la ley, hacen a un lado a los padres. Los padres no son quienes velan por la excelencia y el buen contenido de los programas para educar a sus hijos, sino los burócratas. Los resultados están a la vista.

¿Qué está en juego? Si continuamos siendo un país en donde la población tiene bajos niveles de escolaridad y además ésta es de baja calidad, somos un país condenado a tener bajos niveles de desarrollo económico y además ser notoriamente in equitativo en la distribución de la riqueza. Simplemente, ¿cómo van a salir de la pobreza si no tienen instrucción alguna? De preservar la estructura del sistema educativo vigente se constituye como el principal elemento que nos mantendrá, como país, en la mediocridad.
Si una empresa privada fracasa, como el capital proviene del bolsillo de sus dueños, la única opción que le queda es cerrar. Si una empresa pública fracasa, siempre puede argumentar que el problema se debe a que el gobierno no le ha dado suficientes fondos. Y ella sí puede recurrir al bolsillo de los contribuyentes.

¿Qué sería si solamente existiera un banco estatal en México?, lo más seguro es que no nos daría adecuados intereses por nuestros ahorros, y cobraría excesivamente caros los réditos a los préstamos, además de que los prestamos se asignarían por razones políticas y muchas veces incobrables, bueno esto ya lo vivimos . ¿Qué sucedió mientras sólo Mexicana y Aeroméxico eran la única opción para transportarse en avión? Cobraban (cobran en algunas rutas) lo que les daba su gana para satisfacer las “conquistas salariales” de sus sindicatos y el lucro propio desmedido. ¿Qué sucedería si por decreto sólo una empresa estatal X pudiera fabricar automóviles? Estos serían caros, muy caros y malos, y la tecnología se quedaría congelada en el presente, por más reglamentos y leyes que emitiera el gobierno, estos autos no progresarían y también sería factible esperar sólo la fabricación de uno o dos modelos.
Sí, la educación, o sea el capital humano, es condición necesaria para producir bienestar. Si ya por años y años el gobierno ha tenido su oportunidad de educar y hoy se sufren las consecuencias. Valdría la pena que probar otra forma de hacer las cosas, probemos la libertad.

Si no interfiere el gobierno, que produce un monopolio socialista, surge la competencia que mejora la calidad de la educación para que entonces, quienes educan mejor prosperen más. El resultado sería que todos los jóvenes estarían mejor educados y los maestros ganarían más de lo que un estado burocrático, con medios limitados, les puede pagar. Por esto, opino que la solución fundamental es privatizar la educación. Pero al mismo tiempo deberá de permanecer siendo gratuita para los que no estén en condiciones de pagar una colegiatura. ¿Cómo lograr esto? Por un lado mantenerla gratuita, y por el otro crear un sistema de competencia. La solución propuesta por el economista Milton Friedman y que ya se practica en algunos países como Chile, Corea y en el estado de Louisiana en EEUU es la creación de vale por educación.

Así este vale podría tener un valor nominal y los padres podrían aportarlo como colegiatura, y podrían optar por poner un poco más quizá para colocar a sus hijos en una mejor escuela. Por otra parte, a las escuelas privadas no les es negocio establecerse en los barrios pobres o áreas rurales, a menos que reciban algún subsidio. Como el gobierno regala la educación, no es posible vender algo a un precio que ni siquiera cubre los costos. Pero al emplearse los vales, los padres podrían entonces enviar a sus hijos a las escuelas que quieran y escuelas privadas se establecerían en barrios pobres. Estoy seguro además que a muchos maestros de escuelas públicas les encantaría independizarse, abriendo sus propios colegios. Sería muy buen negocio. Y las escuelas todas tendrían que mejorar para no perder a todos los alumnos. O mejoran o cierran. En ninguna área hay progreso sin competencia. Con este sistema se logra el doble objetivo: Se preserva la educación gratuita pero al mismo tiempo se crea la competencia que es la única forma posible para que la educación mejore.

Adicionalmente a las escuelas debe de otorgárseles autonomía de gestión, cada escuela, cada profesor deberá ser libre de escoger los métodos que le parezcan más apropiados, por supuesto, debiera de existir una entidad evaluadora que deberá de examinar el desempeño de las escuelas y publicarlo para que los padres de familia tengan las bases de juicio para inscribir a sus hijos.

En lo referente a los libros de texto gratuitos y útiles escolares también gratuitos éstos debieran de desaparecer, en su lugar, otra vez, se daría vales por libros que podrían ser canjeados en las librerías, esto sería benéfico por todos lados donde se quiera ver, se promovería la creación para una misma materia de múltiples libros esto es, existiría creatividad para abordar un mismo tema, que se materializaría en múltiples opciones, y se dejaría al arbitrio de los profesores seleccionar la mejor opción, esto no puede sino redundar en un mejor nivel educativo con este método los contenidos, métodos didácticos no pueden sino mejorar.

Esta propuesta, parte de la premisa que es la libertad individual expresada con el diario voto de la libertad para elegir es el mejor camino para mejorar la educación, que de las manos del gobierno y el sindicato pase a las manos de los padres. Esto, por supuesto, es inadmisible en una sociedad socialista en que el tirano gobierno tiene control en todo, incluyendo la educación.

El precio que tendremos que pagar será seguir siendo el último país en educación sin importar que tanto más dinero se desperdicie en la educación estatal y en consecuencia perder la oportunidad de entrar a la economía del conocimiento. Poca cosa. Pero ni modo, aquí en México los problemas se resuelven con actos de fe en caudillos, que son los únicos poseedores de la verdad, no en razonamientos ni propuestas. Ni modo. Seguiremos marginados, esta vez del conocimiento.