Después de una introducción al libro de Von
Mises “Teoría del Dinero y el Crédito”, pasamos a la tercera parte de a
ponencia, que fue desde la perspectiva de la Escuela Austriaca de Economía
analizar la Depresión Económica actual y no sólo sus causas sino que también lo
que vendrá.
La Receta al Desastre: Manipular la Tasa de
Interés
Todos vemos como algo “natural” que las
tasas de interés sean manipuladas por los bancos centrales. Se nos dice que el
banco central las fijará de acuerdo con las condiciones de inflación y de
crecimiento en la economía, que cuando se cae en un bache en la actividad
económica el banco central debe bajar la tasas de interés, cuidando, según
esto, que la inflación no se dispare, y viceversa, si existe inflación y/o el
crecimiento económico es demasiado vigoroso y se amenaza con la inflación,
entonces el banco central subirá las tasas de interés.
Es decir, según esta tesis, el banco
central tiene un acelerador y un freno que le permiten acelerar o frenar la
actividad económica, al acelerar o frenar la inflación.
También, aunque no implícitamente, los
gobiernos no se tientan el corazón para fijar altas tasas impositivas para
cubrir “sus gastos”. Al hacer esto, los gobiernos desechan la importancia del
ahorro y la formación del capital por que creen que puede eficazmente
substituirse por crédito barato.
¿De dónde salen estas ideas, tan comúnmente
aceptadas?
Por supuesto de Keynes, que dio a los
gobiernos un marco teórico que justifica su intervención y la inflación en
esta, el área financiera y en todas las áreas de la economía…
En su “General Theory…”, Keynes afirma
categórico que las tasas de interés no son auto ajustables a un nivel propicio
para tener una ventaja social y constantemente tienden a subir demasiado.
Y, explica que el mundo después de varios
milenios de ahorro por los individuos, es tan pobre…que se explica…por las
altas tasas de interés. ¿No será por culpa de los gobiernos que destruyen la
riqueza?
Y que esto se explica por que la gente
“atesora” su dinero por miedo, lo cual crea escasez en los fondos disponibles
lo que sube las tasas. Parcialmente por que los dueños del dinero no “aceptan”
tasas razonables.
Por consiguiente Keynes recomienda que sea
el gobierno el encargado de bajar las tasas de interés a un nivel “razonable”,
al incrementar la cantidad de fondos disponibles para el crédito. Esto se logra
creando dinero nuevo, y, por consiguiente, dando la ilusión de que existe mucho
dinero ahorrado.
Keynes escribe que,
“El cambio en la cantidad de dinero está
dentro de los poderes del gobierno. La cantidad de dinero aunada a la
disponibilidad de los prestadores a prestar es lo que determina la tasa de
interés”.
Y advierte Keynes que no se le debe tener
miedo a esta “ingeniería” gubernamental, los temores de que se inunde el
mercado con dinero no tienen fundamento nos dice que “El dinero nuevo que es
impreso por el gobierno e introducido al sistema financiero mediante la
expansión en el crédito de los bancos es tan genuino, tan real como cualquier
tipo de ahorro. Esto debido a que no existe ninguna virtud en la tasa de
interés alta preexistente no existe mal alguno en bajarla mediante la
intervención del gobierno."
Y el ataque de Lord Keynes a las tasas de
interés va más allá y nos dice que “Es deseable y factible reducir las tasas a
la meta final: Cero. Pero no deberá de llevarse en forma abrupta: Para una
comunidad adecuadamente administrada, será posible llevar las tasas de interés
a cero en aproximadamente una generación”.
Pero aquí viene lo bueno, veamos cual es el
objetivo final de Keynes con este ataque al nivel de las tasas de interés:
“Nuestro objetivo (no existe nada que no se
pueda lograr), deberá ser incrementar la cantidad de capital hasta que deje de
ser escaso, de tal forma que los dueños de los ahorros dejen de percibir un
premio”…
“Los dueños del capital son disfuncionales,
pueden obtener interés por qué el capital es escaso. Pero, no existe razón
alguna para que exista escasez de capital dado que el gobierno puede imprimir
todo el dinero que sea necesario y distribuirlo. Al hacer que el capital
gratuito sea disponible para todos podremos despojarnos de muchas de las
características indeseables del capitalismo. Los inversionistas o prestamistas
ricos desaparecerán.”
“Visto bajo esta luz, es abominable para
los trabajadores que estén desempleados, cuando en realidad hay mucho trabajo
útil por realizar, todo por que el capital se hace artificialmente escaso, las
tasas de interés son demasiado elevadas, y en consecuencia la inversión es muy
riesgosa. “
Keynes está conciente de la existencia de
las crisis económicas, recesiones y depresiones, y afirma categórico que éstas
no tienen ningún propósito útil al servir como purgatorio. Esto es falso,
afirma Lord Keynes.
Keynes también en su “General Theory…”,
afirma que los booms pueden crear alguna que otra inversión mal direccionada. Y
que el bache puede ayudar a deshacerse de la madera muerta. Pero, que es mucho
mejor tener inversiones mal direccionadas, a no tener ninguna. Por lo que
concluye que las recesiones no son necesarias para el progreso económico ya sea
por su característica de purgatorio o para moderar la especulación al
introducir el miedo a la toma de riesgos alocada. Por el contrario, dice lord
Keynes que es menester,
"Abolir las recesiones"
Y, en su lugar, mantener (mediante al
intervención de los gobiernos vía los bancos centrales) un
"Perpetuo Cuasi-Boom."
Lo que justifica, el párrafo con el que
inicié este análisis. El Banco Central tiene el freno y el acelerador para
evitar el bache, y permanecer en un eterno y perpetuo Cuasi Boom….
¿Un Perpetuo Cuasi Boom? Perdón...
Índice Nasdaq 100 en donde están la mayoría de las acciones tecnológicas, y desde luego las punto com.
Y, la responsable de la anterior...
Keynes y su Remedio Contra las Recesiones
Para Keynes el ahorro es la causa de todos
los problemas de crecimiento económico, en sus palabras “sufrimos de exceso de
ahorro”. Paradójicamente él soluciona este problema introduciendo una nueva
forma de “ahorro”, esto es, dinero nuevo creado por los gobiernos que será tan
“genuino” como lo son los ahorros privados. Este nuevo dinero no deberá causar
inflación (en el sentido keynesiano, por supuesto, es decir incremento en los
precios al consumidor)
Por eso, cuando exista un crash financiero,
una recesión o primero uno y luego el otro Keynes recomienda la intervención
del gobierno “pronta, decisiva y sin contemplaciones”, escribe que: “Las
recesiones profundas nos dicen que estamos en un embrollo colosal. Que hemos
realizado una pifia en una maquinaria delicada que requiere urgentemente ser
reparada. Se deberán aplicar por tanto acciones atrevidas, intrépidas y
drásticas al menor signo de problemas, deberán ser tan radicales como sea
necesario, por que de lo contrario, los mercados perderán su capacidad de
rebotar” (Keynes collected writings).
Efecto de los QEX "Aligeramiento Cuantitativo" de la Reserva Federal sobre el Indice S&P500
Realmente Drásticas
Dinero en circulación M2 Nótese que desde que entró Obama se ha DUPLICADO
Pero, a continuación la Velocidad del Dinero de ese mismo M2
Mucho dinero pero parado, en las arcas de los bancos, que no dan crédito, por qué son más escrupulosos y sobre todo por qué la gente no quiere endeudarse...
Por lo que han resultado infrutuosas e inútiles...
Todos somos Keynesianos
No es de
extrañar que Paul Krugman, haya manifestado que “Todos ahora somos
keynesianos”, y con él, Ben Bernanke, Stiglitz y todos los maniacos
inflacionistas, que claman, bajar las tasas de interés, crear déficit y
construir obra publica. Recetas que dicho sea de paso tienen a Europa en el
barranco y a Japón en una depresión económica que ya se extiende por más de
veinte años.
Von Mises y la Expansión del Crédito
Mises
previó que los gobiernos, harían lo que recomienda Keynes (Cuando escribió
Acción Humana Keynes aún era irrelevante): Empujar las tasas de interés para
abajo mediante la expansión del crédito movidos por una mentalidad
anticapitalista (recordemos que capital es en esencia ahorro).
Para los ojos de los maníacos y demagogos
instalados en los Bancos Centrales y en los gobiernos, el interés es una
maquinación siniestra de explotadores, usureros, de los ricos dueños del
dinero. Uno de los dogmas del moderno intervencionismo es que los gobiernos
deben de bajar las tasas de interés tanto como sea posible, o como recomienda
Lord Keynes abolirlas por completo en una generación. En los tiempos presentes,
todos los gobiernos y los “medios especializados” están dedicados fanáticamente
a la política del dinero fácil.
En los capítulos XIX y XX de “Acción
Humana”, Mises explica que una vez que se presenta la crisis económica, que ve
como la consecuencia inevitable de la incesante e implacable de la introducción
de dinero de papel en la economía, que como una droga, hace que el público
clame por más, por más dinero fácil, y más baja la tasa de interés, nos dice
Mises que esa política se verá como el remedio contra la recesión y la
deflación, a la que le tienen pánico los gobernantes. Sin embargo, Mises
establece que esa política nos llevará finalmente a terminar con la destrucción
del valor de intercambio del dinero. Esto es, la hiperinflación.
El boom puede durar tanto como la expansión
en el crédito siga su curso, eso es lo que lo alimenta, a un ritmo acelerado.
El boom llega a su término tan pronto como el ritmo de dinero fiduciario que es
introducido al sistema disminuye o, de plano, se suspende. Y debe de llegar a
este punto, debido a que aún si la inflación (en el sentido de mayor dinero en
circulación, no el keynesiano) y la expansión en el crédito prosigan sin fin,
encontrarán barreras naturales que evitarán que continúe la expansión del
crédito, esto fácilmente puede comprenderse cuando el individuo, o un país,
llegan a un punto tal en que el servicio de su deuda se vuelve difícil o
imposible, aún con bajas tasas de interés. La incapacidad de seguir absorbiendo
el crédito, aún el crédito fácil llevará al crack del boom y el colapso de todo
el sistema monetario que está basado precisamente en la deuda. Los
incumplimientos de créditos destruyen todos los activos bancarios poniendo en
entredicho todo el sistema.
La Tasa de Interés del Mercado –Refleja la
Preferencia de la Gente por el Presente
La gente siempre ha mostrado antipatía, aún
hostilidad al fenómeno de la tasa de interés. La tasa de interés parece ser un
obstáculo a la producción y al empleo. Como resultado, hemos leído las
recomendaciones de Lord Keynes que son seguidas por los gobiernos para
manipularlas, para intervenir en el mercado suministrando dinero para producir
la ilusión de mucho ahorro y así tirar las tasas. “Tan genuino como el ahorro
real”, decía Keynes…A la discreción del Banco Central.
La falta de entendimiento de la misma
naturaleza de lo que es la tasa de interés induce a problemas. Mises enfatiza
que la tasa de interés (o, como Mises escribe, “la tasa de interés original”)
es una categoría de la acción humana. En un mercado no manipulado, refleja las
“preferencias temporales” de la gente. Debido a que los bienes y servicios son
escasos, la gente le da mayor valor a los bienes y servicios hoy (“bienes
presentes”) que a los bienes y servicios en algún punto en el futuro (“bienes
futuros”). Es por eso que los bienes presentes se adquieren con un premio sobre
los bienes en el futuro. Ese premio es la tasa de interés, o la tasa de
preferencia temporal.
Supongamos que yo quiero comprar un auto,
puedo ahorrar digamos por 3 años para adquirirlo, o bien, podemos tomar el
ahorro de alguien más para que haga posible que tenga el auto hoy mismo. Como
para mí vale más tenerlo hoy que tenerlo en 3 años, pago el sobreprecio que es
la tasa de interés.
La tasa de interés de mercado es el
resultado de ahorradores que desean intercambiar bienes futuros contra bienes
presentes en un “mercado temporal”. Debido a la preferencia en el tiempo, la
oferta de bienes presentes (esto es, la demanda por bienes futuros) está
relacionada positivamente con la tasa de interés, mientras que la demanda de
bienes presentes (oferta de bienes futuros) está negativamente relacionada con
la tasa de interés.
La tasa de interés no es lo que motiva el
ahorro, ni es tampoco un premio para abstenerse de consumir. La tasa de interés
simplemente expresa las valuaciones individuales de los bienes en el futuro
contra los bienes en el presente. La tasa varía de acuerdo con la preferencia
temporal de la gente. Por ejemplo, si la preferencia temporal de la gente
disminuye, la gente ahorrará e invertirá más y consumirá menos de sus ingresos:
Esta disminución en la preferencia temporal, presionará a que baje la tasa de
interés de equilibrio.
Contrario a lo que casi todos los economistas,
derivado del aprendizaje de Keynes. El decaimiento en la preferencia temporal
produce que una mayor porción del ingreso disponible sea ahorrado e invertido
en negocios productivos lo que produce crecimiento económico. A medida que la
porción de bienes presentes son bienes de producción, bienes de capital, y
decrece la porción de bienes de consumo se está alistando la planta productiva
para producir más en el futuro.
Para ilustrar esto considérese la siguiente
figura, sea la tasa de equilibro del mercado i0 para el punto A, para la cual,
los ahorros (esto es la oferta de bienes presentes) vale S0 y la inversión
(esto es la demanda de bienes presentes) vale I0. Si disminuye la preferencia
temporal de los demandantes de bienes presentes moverá la tendencia al ahorro
de S a S’ resultando en una nueva tasa de interés que es i1 para la cual el
ahorro vale S1 y la inversión I1, El punto B marca un punto estable que refleja
las preferencias reales de la gente, esto es, lo que desean ahorrar, invertir y
consumir.
Imprimamos Dinero Acción que se Traduce en
Problemas
En un mercado libre, la tasa de interés
cambia acorde con las preferencias temporales de la gente. Sin embargo, habrá
un problema muy grave si la tasa de interés es intervenida y bajada por el
gobierno, esto es por el banquero central. Esto típicamente lo logran al
inducir a los bancos comerciales a aumentar la cantidad de dinero disponible
para prestar.
Ahora los bancos empiezan a prestar y
derramar el dinero en la economía. Como resultado, la tasa de interés del
mercado cae. Los empresarios se aprovechan de esta tasa de interés baja para
adquirir equipo nuevo, contratar gente, comprar materias primas, y acrecentar
los inventarios. Expanden la producción de bienes de capital (productivos)
relativo a bienes de consumo (tal y como sucede cuando naturalmente disminuye
la preferencia temporal) Los negocios actúan como si efectivamente los ahorros
hubiesen aumentando.
Sin embargo, el incremento en la demanda de
los factores para la producción no se acompaña de un incremento en los recursos
disponibles en la economía: El incremento en la cantidad de dinero no
incrementa la cantidad de bienes presentes que desean intercambiarse por bienes
futuros. Como resultado el incremento en la demanda de los factores de
producción presiona los mercados de los recursos escasos como materias primas y
salarios.
Todo esto se verifica sin que la
preferencia temporal de la gente haya cambiado. La verdad es que el público no
desea ahorrar e invertir más que antes del incremento en el suministro de
dinero a través del crédito. Tarde que temprano, la gente retornará a sus
proporciones deseadas de consumo-ahorro.
A medida que la gente regresa a su preferencia
consumo-ahorro, queda de manifiesto que las empresas invirtieron en demasía en
relación a los bienes de consumo. La demanda de los productos de las empresas
no es tan grande como se esperaba, los empresarios paran la adquisición de
bienes de producción y la industria de bienes de capital experimenta una caída.
Utilizando un gráfico similar para ilustrar
estas ideas considérese la siguiente figura en donde como antes el punto A es
el equilibrio entre tasa de interés, ahorro e inversión. Pero ahora, la curva
se desplaza a S’ = S+DM, no por que hayan cambiado las preferencias temporales
del público, sino por que se induce una derrama monetaria DM (que Keynes llama
“ahorro genuino” ). Como antes, se llega a un punto de equilibro B, la tasa cae
a i1, mientras que ahorro e inversión se mueven a S1 e I1 respectivamente.
Y sí, al hacer esto la economía experimenta
un boom, originado por la inversión inducida por el dinero adicional
introducido mediante créditos. Sin embargo, este nuevo punto de equilibrio, con
menor tasa de interés, mayor inversión y toda la expansión económica no es
estable, en el sentido de que representa las preferencias temporales reales de
la gente. Esto es debido a que la tasa de interés i1 es menor a la tasa de
interés i0 que está acorde con las preferencias temporales de la gente, por
esto, la gente desea retornar a su punto de equilibro consumo-ahorro, o incluso
debido a los excesos a una curva S todavía más a la izquierda, esto implica
moverse de regreso de B a A. Este desplazamiento significa el reventón del boom
previamente originado.
Los austriacos sobre el ciclo económico
De esta forma, recapitulando, cuando los
tipos de interés se empujan por debajo de sus niveles de mercado (por ejemplo,
mediante una política expansionista del banco central), esto pone en marcha el
mismo proceso que se produciría si hubiera un aumento real de los ahorros. En
otras palabras, al tipo de interés inferior los empresarios encuentran rentable
empezar proyectos a largo plazo: los sectores de bienes de capital de la
economía empiezan a contratar trabajadores y a aumentar la producción.
Sin embargo esta expansión de los sectores
de bienes de capital no se ve compensada por una disminución en los sectores de
bienes de consumo en la forma que se habría producido si las familias hubieran
empezado realmente a ahorrar más. En su lugar, las familias tratan también de
consumir más a causa de los tipos de interés más bajos.
Se pone en marcha un auge insostenible, un
periodo de prosperidad ilusoria. Como todos los sectores se expanden hay un
sentimiento general de euforia: parece que todos los negocios están teniendo un
“gran año” y la tasa de desempleo cae por debajo de su nivel “natural”.
Pero todo esto es falaz, el dinero que ha
producido el auge, no es producto de los ahorros de nadie, es dinero creado de
la nada en virtud del sistema de reserva fraccionada, y de la colaboración del
Banco Central. Es dinero falsificado, es dinero que nadie ganó, simplemente se
creó por que así lo quiso la autoridad monetaria.
Booms de Activos sin Ahorro
Por desgracia, en algún momento la realidad
muestra su feo rostro. El banco central no ha creado más recursos simplemente
comprando activos y rebajando tipos de interés. Es físicamente imposible que la
economía continúe produciendo los mayores volúmenes de bienes de consumo al
tiempo que los bienes de capital. Alguno tiene que acabar rindiéndose. El
cálculo llegará más pronto que tarde si el aumento de los precios de los
activos o incluso de los bienes de consumo hace que el banco central varíe el
rumbo y aumente el precio de los tipos de interés, que fue el motor de la
creación del auge, de la burbuja. Pero incluso si el banco central mantiene los
tipos permanentemente bajos, las realidades físicas acabarán manifestándose y
la economía sufrirá un declive.
Durante la fase de declive, los empresarios
reevaluarán la situación. Si el gobierno y el banco central no interfieren, los
precios darán las señales adecuadas acerca de qué empresas debería salvarse y
cuáles desaparecer. Los trabajadores que estén en líneas insostenibles serán
despedidos. Les llevará un tiempo buscar entre las oportunidades que se creen y
encontrar un nicho que sea apropiado para sus capacidades y sea sostenible en
la nueva economía.
Durante este periodo de reevaluación y
búsqueda, la tasa de desempleo medida será inusualmente alta. No es que los
trabajadores estén “ociosos” o que su productividad haya bajado a cero
repentinamente, sino que es lo que necesitaban para recolocarse y eso necesita
tiempo en una economía compleja moderna. Este retraso puede deberse a la simple
búsqueda, cuando los trabajadores tienen que mirar a su alrededor para
encontrar el mejor puesto que ya exista “ahí fuera” o puede deberse al hecho de
que tengan que esperar a que otros trabajadores “preparen las cosas” antes de
puedan recuperarse los trabajadores desempleados.
Gráfica del Oro Londres ¿Qué nos dice esta gráfica? Fácil : INFLACIÓN
Auge y Reventón Inmobiliario
Voy a presentar un conjunto de gráficas que
demuestran las ideas austriacas, me voy a concentrar en el auge inmobiliario
que llevó al colapso en el 2007-2008.
Las siguiente gráfica muestra la tasa efeciva de ahorro, que debiera, tan sólo debiera ser la que controlaría las tasas de interés.
La gráfica que sigue, muestra la tasa de interés
fijada por la Reserva Federal, la que define la denominada “política
monetaria”. En ella puede verse, en primer lugar como el incremento en la tasa
a principios del año 2000 reventó la burbuja de las punto com, que es el
antecedente de la burbuja inmobiliaria. Alan Greenspan entonces a cargo de la
Reserva Federal inició el bombeo monetario
para “neutralizar” el colapso financiero bajando la tasa de interés,
dejándola cercana al 1 % lo que re infló los índices accionarios y creo una
nueva burbuja la inmobiliaria.
Fondos Federales en casi ¡CERO!
La siguiente
gráfica muestra como a partir del año 2000, la baja en las tasas de interés
también empuja a la baja las tasas hipotecarias, esto, junto con la
flexibilización para otorgar créditos genera la burbuja inmobiliaria.
Tasas hipotecarias en mínimos históricos y ni así se recuperan
Deuda gubernamental a diferentes plazos
Compárese estas dos últimas gráficas con la gráfica del ahorro
personal que no hace sino corroborar la Teoría de von Mises-Hayek que acabo de
mencionar: Caen las tasas de interés pero el ahorro está en mínimos históricos,
esto no puede ser, es una aberración económica.
Simultáneamente
al crecimiento del índice S&P500 (del 2003 al 2007) se dio la burbuja
inmobiliaria y un auge también explosivo en el consumo. La gráfica siguiente
muestra el índice de precios de casas habitación en rojo y en azul el déficit
comercial de los EUA (aumenta haciéndose más negativo) toda una orgía de
consumo y especulación originada por la bajas tasas de interés que Greenspan
mantuvo durante todo ese tiempo. Ya con la recesión (áreas sombreadas) la gente
se vuelve conciente y para el consumo por lo que los precios de los bienes
raíces empiezan a caer y el déficit comercial a disminuir.
También podemos obtener un apoyo empírico a
la afirmación austriaca de que el auge inmobiliario produjo una cantidad
insostenible de recursos reales (incluyendo el trabajo) hacia ese sector, que
acabó desmoronándose y causó un repunte en el desempleo. El siguiente gráfico
compara el empleo total en la construcción (línea azul) con la tasa de viviendas
vacías (línea roja), lo que es un buen indicador de una burbuja especulativa:
la gente no estaba comprando viviendas
para vivir allí o para alquilarlas, sino para “saltar” cuando el precio suba. Adviertan
la conexión entre la burbuja especulativa de la vivienda y los trabajadores
absorbidos (y luego expulsados) de la construcción.
Creo que estas gráficas son suficiente
evidencia de cómo al bajar el banco central la tasa de interés, sobre todo, al
bajarla cuando no hay ahorro, la tasa de interés sería naturalmente baja si
hubiese ahorro, pero cuando como Greenspan baja la tasa bajo un esquema de bajo
ahorro y alto apalancamiento es la receta del futuro desastre.
Pero en lo que se refiere al auge
inmobiliario real bajo George W. Bush, la acumulación de SUV, pantallas de televisión,
consolas de videojuegos de los estadounidenses era claramente
insostenible. No era posible que China siguiera permanentemente financiando la
compra de sus productos comprando deuda norteamericana, esto es regresando los
dólares para que siguieran comprando.
Creo que el argumento debido originalmente
a Milton Friedman, de que la estadística no da la razón a la teoría austriaca
está debidamente refutado en las gráficas que he mostrado.
Sobre el cuestionamiento de cuanto es bajo,
hablando, claro está de las tasas de interés, hay dos consideraciones: Es diferente un tipo
de interés bajo cuando se produce la expansión en el crédito, cuando como en la
gráfica precedente no hay ahorro, este tipo de interés es el responsable de la
generación de burbujas, y el interés también bajo pero después del colapso de
la burbuja, aquí, no existe la expansión en el crédito, la gente no toma
crédito la gente se desapalanca, ahorra paga sus deudas, al gente se hace más
conciente del futuro, también los bancos que han quebrado y han sido rescatados
y son los “villanos” de la película están renuentes a prestar, las condiciones
para otorgar créditos, especialmente hipotecas son muy estrictas, por tanto, no
importa en que nivel Bernanke situé las tasas de interés, no habrá expansión en
el crédito.
Así, antes del crack, la baja en las tasas de interés es responsable
de la crisis subsiguiente. En el post
estallido, las tasas de interés bajas son inocuas por que la gente simplemente
está preocupada por el futuro, por su endeudamiento presente y no va a tomar
más crédito. De esta forma, sí, no siempre las tasas de interés producen una
crisis, depende de si la gente le entra a la formación de la burbuja o no. Y
enfatizo, la Economía es Acción humana, conciente y con propósito, y su
correcta interpretación es lo que nos puede llevar a analizar con propiedad el
estado de las cosas.
Si se quiere ver más evidencia, sobre la
veracidad de la teoría austriaca sólo es necesario que vaya a la Florida o Las
Vegas, y vea la cantidad de casas, condominios etc. que se quedaron a la mitad,
que vea la cantidad de casas vacías, sin dueño, que vea toda la destrucción de
capital que la baja de tasas de Greenspan causó.
También, se puede ir a China, ver pueblos
fantasma nuevos, casitas que no han sido adquiridas, también puede ver que hay
tanto como el espacio de oficinas
equivalente a Manhattan, vacíos. Esto dicho sea de paso, ya empieza a generar
un problema mayúsculo en el gigante asiático, la destrucción de capital va a
tener consecuencias muy lamentables en el futuro próximo.
También podría ir a Irlanda, a España, en
donde los “pisos” llegaron a valores ridículos, y véalos ahora, con precios de
¼ del valor que llegaron a tener. Todas
estas fueron malas inversiones que deberán ser liquidadas.
¿Qué causó todo esto? La expansión en el
crédito acompañada de bajas tasas de interés.
Finalmente es representativo de un
empresario que hace una mala inversión la mexicana Cemex que casi al final del
auge compró a la australiana Rinker el 10 de abril de 2007, unos cuantos días
antes del reventón. Hoy Cemex está severamente emproblemada, debido a esta mala
inversión. Si Lorenzo Sambrano hubiera tenido un austríaco entre sus filas de
economistas seguramente le hubiera advertido del peligro que se venía, y quizá
Cemex no tendría el elevado endeudamiento que tiene de 18 veces contra su valor
de capitalización, lo que la hace inviable.
Finalmente sólo deseo que si bien es cierto
que ciclo es en Física un fenómeno repetitivo, en Economía austriaca más bien
tiene que ver con la creación de la burbuja, y el subsecuente estallido de la
misma que termina generalmente en una recesión. Esto es crecimiento –colapso.
Más que referirse a algo repetitivo y cíclico en el sentido de la Física.
Aunque bien podría ser, desde 1913 fecha en que se creo la Reserva Federal, nos
la hemos pasado creando auges artificiales que revientan y crean recesiones, en
este sentido sí, podríamos hablar de un ciclo, claro con períodos muy
diferentes entre sí.
La economía no funciona como un sistema de
control retroalimentado, en que dado el estímulo, la baja en la tasa de
interés, desatara siempre una serie de sucesos. Sobre el cuestionamiento del
tiempo, tampoco esto es modelable, la expansión del crédito por un tiempo
suficientemente largo genera una burbuja, ¿Cuánto es largo? Bueno por el tiempo
necesario para que se genere una burbuja, llámese accionaria, inmobiliaria, de
materias primas, eso generar una burbuja es la consecuencia de la baja en la
tasa de interés.
En 1999 Greenspan que mantenía las tasas
bajas mientras la burbuja de las punto como crecía, sólo se limitó a decir de
la “exhuberancia irracional”. En realidad el que era irracional era el, se
acobardó para parar el desarrollo de la
burbuja en el Nasdaq, simplemente no quería pasar a la historia como el que
dejó a Wall Street en llamas. Aunque finalmente, años después, lo hizo.
La causa de la crisis en el crédito tiene
un nombre: El régimen de dinero de papel, de dinero “fiduciario” que los gobiernos
imprimen, siguiendo las recomendaciones de Lord Keynes con singular alegría.
Este diagnóstico está tomado de la Teoría
Monetaria del Ciclo de Negocios desarrollada por Ludwig von Mises. En su obra
monumental “Acción Humana, un Tratado de Economía” escribe,
“Los movimientos similares a olas que
afectan los sistemas económicos, la recurrencia de períodos de auge que son
seguidos por períodos de depresión es el resultado inevitable de todos los
intentos, que se repiten una y otra vez, de bajar la tasa de interés de los
mercados por medio de la expansión crediticia. No hay modo de evitar el colapso
final de una burbuja inflada por la expansión artificial del crédito. La
alternativa es si la crisis se dejará venir pronto como resultado del abandono
de seguir expandiendo el crédito, o, posponerla, para que se presente la
catástrofe que involucre todo el sistema monetario de dinero fiduciario”.
Para allá vamos, ¿Cuándo exactamente? No puede saberse...